Crear un concepto de marca que logre comunicar la transformación que está teniendo el negocio y al mismo tiempo, la esencia con la cual surgió la marca, consiguiendo una diferenciación clara de la competencia.
Se construyó una identidad corporativa inspirada en la letra A, para hacer referencia los nombres de ambas hijas del dueño de la marca, por otro lado, se incluyó el concepto de la luna, representando la luz, el crecimiento y la regeneración del negocio.
El concepto y lenguaje visual creado para la marca, permitió cambiar la perspectiva del consumidor respecto al producto, logrando que éste lo perciba ahora con un valor más alto y cause un impacto mayor visual.